COLECCION CHIPRIOTA
El museo del santuario pone en valor su
colección chipriota, la más importante de España, con la publicación del
catálogo y el resultado de las investigaciones de sus piezas
Cuando Himmler acudió a Montserrat en
búsqueda del Santo Grial poco pensaba que el Santuario contaba en sus
dependencias con una cruz gamada con la que quizás se hubiera sentido
identificado, aunque su origen es mucho más antiguo y, evidentemente, su
significado nada tiene que ver con el nazismo. En realidad, se trata de uno de
los elementos decorativos de la cerámica de la colección chipriota del museo,
cuyo valor e importancia se pone en relieve ahora con la publicación del
catálogo y de las investigaciones realizadas por diferentes especialistas.
La colección chipriota forma parte del
antiguo Museo del Oriente Bíblico que fundó el padre Bonaventura Ubach con el
fin de ilustrar con piezas arqueológicas los diferentes escenarios que recorren
las Santas Escrituras. Y, sin pretenderlo, se ha convertido en la más
importante del estado español, tanto por el número de piezas, unas 200, como
por los periodos que implica: de la Edad de Bronce hasta el periodo romano, es
decir, del 2.000 aC hasta el siglo primero. “El padre Ubach utilizó un criterio
científico cuando escogió las piezas y también destaca la calidad artística de
muchas de ellas”, explica Maria Teresa Magadán Olives, investigadora del
Institut del Pròxim Orient de la UB y del Institut Català d’Arqueologia
Clàssica, que lleva unos veinte años estudiando la colección chipriota
montserratina.
Un plato de la cultura chipriota del
950-850 aC con decoración de esvásticas perteneciente a la colección de
Montserrat
Un plato de la cultura chipriota del
950-850 aC con decoración de esvásticas perteneciente a la colección de
Montserrat (Javier Uriach)
Evidentemente, las esvásticas, presentes
en platos y jarras elaboradas en épocas tan lejanas como el primer milenio
antes de cristo, llaman la atención del visitante. “No sabemos si son un
elemento original de Chipre o llegó por influencia de Mesopotamia, donde ya se
encuentran en el 4.000 aC”, detalla Magadán antes de añadir que su simbología,
así como la dirección de sus astas, es variada, desde “la representación de los
cuatro vientos, flores estilizadas o elementos solares”.
SILVIA COLOMÉ
La Vanguardia
No hay comentarios:
Publicar un comentario